¿Niños normalizados?

De seguro puedes llegar a pensar que este concepto no es positivo o favorable, pero es todo lo contrario, en el libro La Mente Absorbente, Maria Montessori define la normalización como “el proceso por el cual el niño abandona todos los comportamientos negativos y adquiere comportamientos positivos de una manera espontánea y sin esfuerzo” en realidad éste tipo de proceso traen como resultado niños menores de 6 años que logran sentir satisfacción por sus logros, alegría, calma, paciencia, autocontrol, empatía y autodisciplina.

Si bien no es una cualidad interna que podamos forzar y desarrollar, pero si podemos favorecerla a través del apoyo en las actividades que realizamos, la forma más efectiva de hacerlo es por medio de la vida práctica ejercicios que son fáciles de adaptar a nuestros hogares permitiéndole al niño participar en las tareas diarias de la casa como: lavar trastes, tender camas, poner la mesa, lavar la ropa, barrer, sacudir si pones atención no son actividades costosas y sus beneficios son múltiples.

Algunas actividades que podemos realizar y que poco a poco irás observando los resultados son:

  • Caminar sobre la línea: un ejercicio básico en los ambientes que promueve el autocontrol y desarrollo de la voluntad, imagina a un niño de 4 años que logra inhibir los movimientos de su cuerpo y terminar de caminar sobre ella respetando su espacio y el de sus compañeros, es increíble observarlo. Debemos cuidar que el caminado sobre ella sea muy despacio y que ambos pies toquen “punta talón” al dar el paso para que mejore su coordinación y concentración; una vez dominado podemos agregar colocar un cojín relleno de semillas sobre la cabeza, caminar con un vaso con agua, una charola con un objeto rompible o evitar que suene la campana. Aunque parece difícil al leer los niños tienen la capacidad de hacerlo y recuerda que su autoestima también se ve beneficiada al obtener el sentido de logro con las actividades.
  • Organizar sus juguetes: el orden exterior irá dando pauta a desarrollar el orden interno, estanterías bajas y a su alcance darán la oportunidad de que elija con qué quiere jugar, también apoya que cada juguete tenga un lugar específico
  • Materiales naturales: es preferible que los juguetes que tengas en casa sean de buena calidad y no en cantidad, así permites dentro de lo posible, una experiencia sensorial, otro punto también es que el plástico es prácticamente indestructible haciendo que muchas veces lo utilicen no de la forma correcta y no haya una consecuencia lógica de romperse sino se tiene cuidado, por eso se promueve el uso de vidrio y materiales rompibles

Ponlo en práctica en casa y observa qué cambios notas en tu hijo, aunque ahora en casa es casi imposible uno de los mejores tips para promover la normalización es limitar el tiempo de exposición a pantallas, los estímulos que reciben, las conductas que observan en los personajes y las realidades que muestran quedan fuera de nuestro contexto y alteran la actividad cerebral de nuestros hijos. El contacto con la naturaleza, cuentos, la vida práctica y las relaciones con otras personas darán como resultado niños más tranquilos y abiertos a probar actividades nuevas de reto.

Autor: Teresa Jaime Ortega
Guía Montessori